Sobre
la
rosa
considerada
la
reina
de
las
flores
se
podría
escribir
un
tratado.
El
mito
nos
dice
que
cuando
Afrodita
(Venus
para
los
Romanos)
nació,
de
la
espuma
del
mar
que
se
deslizaba
por
su
blanca
piel,
surgió
de
su
pecho
una
flor
maravillosa,
era
una
espléndida
rosa
blanca
y
Baco
acercándose
dejó
caer
de
su
copa
una
gota
de
vino,
entonces
toda
la
rosa
se
tiñó
de
rojo.
Así
la
rosa
blanca
pasó
a
ser
el
símbolo
de
la
luz,
la
pureza
y
el
nacimiento
del
día,
y
la
rosa
roja
el
del
amor,
la
pasión y la muerte.
Los
simbolismos
más
precisos
vienen
de
su
variedad
de
colores
y
del
número
de
hojas
o
pétalos,
una
rosa
amarilla
significa
la
Obra
realizada,
una
finalidad
alcanzada,
la
rosa
azul
lo
imposible,
la
de
color
de
rosa
es
el
símbolo
de
la
regeneración,
debido
a
esta
interpretación
en
la
antigüedad
se
ponía
una
corona
de
estas
rosas
en
las
tumbas,
con
una
ceremonia
llamada
"Rosalia".
La
referencia
a
la
rosa
roja
y
el
amor,
la
encontramos
reseñada
en
el
poema
"Romance
de
la
rosa"
donde
Guillaume
de
Lorris
la
describe
como
el
tabernáculo
del
jardín
del
amor
de
la
caballería,
hoy
en
día
en
Cataluña
se
rememora
este
significado en el día de Sant Jordi.
La
simbología
Cristiana
ha
dado
varios
significados
a
las
rosas,
la
rosa
roja
la
asocia
con
el
martirio
y
las
llagas
de
Cristo.
Los
rosetones
de
las
iglesias
quieren
representar
una
rosa
abierta
vista
por
encima,
significando
todo
el
universo
creado,
por
eso
es
importante
que
tenga
todos los colores.
Los
practicantes
del
culto
de
Dionisos
(Baco
para
los
Romanos)
solían
adornarse
con
una
corona
de
rosas
con
la
creencia
de
que
su
perfume
contrarrestaba
los
efectos
del
vino
y
evitaba
que
bajo
estos
efectos
se
hablara
más
de
lo
que
era
conveniente,
con
el
tiempo
la
rosa
se
convirtió
con
el
símbolo
de
la
discreción,
los
antíguos
confesionarios
católicos
se
adornaban
con
una
rosa
de
cinco
hojas
tallada
con
madera,
en
las
salas
donde
se
trataban
asuntos
secretos,
en
el
techo
se
pintaba
una
o
más
rosas,
y
con
el
tiempo
la
costumbre
derivó
hacia
los
rosetones
de
donde
se
colgaban
las
lámparas,
las
cajas
donde
se
guardaban
algunos
secretos
estaban
adornadas
con
rosas,
de
ahí
la
expresión cuando se confía un secreto, se hace "sub rosa".
En
el
siglo
XVII
la
rosa
se
convirtió
en
un
símbolo
hermético
importante.
El
año
1.619
Heinrich
Khunrath
publica
la
obra
"Anfiteatro
cristiano-cabalístico
de
la
única
y
verdadera
sabiduría
eterna",
donde
se
vale
de
una
rosa
abierta
para
simbolizar
la
relación
del
hombre
con
todo
el
universo
creado.
Colocada
sobre
una
cruz
se
convierte
en
el
símbolo
de la sociedad esotérica de los Rosacruces.
Es
también
la
flor
preferida
por
los
alquimistas
donde
las
rosas
blancas
y
rojas
son
el
símbolo
del
dualismo
de
los
dos
principios
primarios,
el
azufre
y
el
mercurio,
la
rosa
de
siete
pétalos
donde
cada
uno de ellos hace referencia a una operación de la Gran Obra.
LA ROSA
RVM